Es necesario recuperar el sistema educativo de la II República para defender la democracia, los derechos humanos y la libertad :

El sistema educativo de la II República fue un sistema educativo que apostó firmente contra la incultura para combatir firmamente el fascismo, fue un sistema educativo que defendió profundamente la democracia, la tolerancia, la libertad, los derechos humanos, la pluralidad de ideas, el pensamiento crítico y el compromiso social. Hoy en día que atravesamos una profunda crisis de valores no solo económica es necesario e imprescindible recuperar este sistema educativo para fomentar valores humanos y valores democráticos que el sistema capitalista quiere recortar, es imprescindible volver a apostar por una educación gratuita, laica, universal, democrática como la de la II República para formar ciudadanos y ciudadanas comprometidos y comprometidas con la democracia. los derechos humanos, la empatía, la libertad y con la lucha contra las injusticias sociales. Es necesario educar en y para la democracia para que los ciudadanos y ciudadanas apuesten por este sistema político como garante de la igualdad y de la solidaridad entre todos los colectivos sociales y entre todas las personas, pueblos y culturas del mundo. Hoy en día hay que educar en el pensamiento crítico entre la ciudadanía para evitar que la dictadura del capital domestique nuestras conciencias y nos convierta en consumidores y consumidoras en vez de ciudadanos y ciudadanas, tenemos que defender un modelo educativo que garantice la igualdad entre todos y todas los ciudadanos y ciudadanas, un sistema educativo que no aliene ni excluya a nadie sino que integre en sus guarderías,escuelas, aulas, colegios y universidades a todas las personas sin exclusión, un sistema educativo que apueste por el compromiso de todos y de todas, profesores y profesoras, familias, alumnado, instituciones, ONgs, toda la sociedad en la transformación del mundo y en un cambio en el sistema de valores que domina nuestro mundo donde reinan el individualismo salvaje, la opresión, las guerras, el consumismo exacerbado, la competitividad, el racismo, la intolerancia, la exclusión social, la herramienta de cambio tiene que ser la educación, una educación laica, gratuita, universal, democrática que favorezca el activismo social y el pensamiento crítico y una educación que apueste por fomentar el compañerismo, la solidaridad, la empatía, la tolerancia, la pluralidad de ideas, el uso del diálogo para solucionar los problemas y una educación que fomente la creatividad y respete el mundo de los sentimiento, una educación al servicio de todos y de todas donde todos y todas tengamos cabia y no se excluya o margine a nadie ni por razón de sexo, raza, color de piel, lugar de procedencia, creencias religiosas o no o por ideas política o por pertenecer a una clase social o otra o por tener una tendencia sexual.
Hay que apostar por un sistema educativo que garantice y fortalezca las instituciones democráticas y el estado del bienestar y que apueste por políticas sociales que garanticen la igualdad, hay que defender una educación comprometida en la transformación social donde los educadores y educadoras y toda la sociedad trabajen colectivamente, cooperativamente en la mejora de la sociedad y del mundo y luchen cada día por mejorarlo y transformarlo no decayendo nunca en el intento de luchar por la utopía de que un mundo más humano es posible, deseable y realizable si todos y todas tenemos el mismo sueño y estamos dispuestos y dispuestas a luchar por el