En defensa de la humildad y el compañerismo:

En estos tiempos que corren donde lo que parece que importa es consumir y adquirir bienes materiales o titulos es más necesario que nunca ser humildes y darnos cuenta de que no nos lo sabemos todo, por cualquier parte ves que las personas no escuchan, no quieren dialogar , se empeñan en tener siempre la razón, dominar a las demas personas por la palabra o recurriendo al insulto o a la descalificación personal, no se recurre al diálogo o a la argumentación, sino a la violencia y a la crispación, pasa en todas las esferas de la vida, política, religión, mundo universitario o incluso en el ámbito familiar, parece que lo que importa es imponer nuestro criterio, decirles a los demás lo que tienen que hacer tratándolos y tratándolas como menores de edad como sino pudieran pensar por ellos y ellas mismas, es más necesario que nunca analizarnos a nosotros y a nosotras mismas, comprendernos para poder comprender a las demás personas, saber que es lo que necesitan para ayudarlas a mejorar sus vidas, tratarlos y tratarlas con amor, respeto, compañerismo, solidaridad, ese tendría que ser nuestro fin en la vida, mejorar la vida de las otras personas en la medida de lo posible, contribuir a dejar un futuro mejor a las generaciones venideras y a los que viven ahora mismo en todo el mundo, sentirnos parte de la humanidad y lo que le ocurra a cualquier ser humano que no nos sea ajeno porque forman parte de nosotros y nosotras mismas, pero sino somos humildes nunca lo llegaremos a ver, por tanto lo importante es ser buena persona, predicar con el ejemplo, todos y todas somos necesarios y necesarias, nadie es mas que nadie y todos y todas i somos iguales y con los mismos derechos pero también deberes. Por tanto la humidad es lo que debe mover a las personas en este mundo que parece que se mueve por el dinero y el afán de tener bienes materiales o poder en vez de ser mejores seres humanos, si perdemos nuestra humanidad no tendremos lo mas bonito que es el amor hacia otras personas y hacia nosotros mismos porque la humildad es amor y ausencia de egoísmo y sobre todo compañerismo y colectividad.