EN DEFENSA DE UN PROFESORADO DEMOCRÁTICO, COMPROMETIDO Y UNA ESCUELA QUE APRENDA

Estos días he estado leyendo un libro llamado La escuela que aprende de un profesor que sigo mucho que se llama Miguel Angel Santos Guerra es un libro muy recomendable, comparto muchas ideas escritas y expuestas en el, considero que hoy en día hace falta un profesorado comprometido con los valores democráticos, que no instruya tanto en conocimientos técnicos sino que inculque un respeto por todo tipo de personas, que motive al alumnado y respete los derechos del niño, es más importante que el niño adquiera valores democráticos de respeto al prójimo, a todo tipo de culturas, que se respeten los derechos de los alumnos y sean escuchados. Hoy en día parece que es más imporante enseñar que aprender,el profesorado se considera el actor principal de el proceso de enseñanza/aprendizaje, importa más transmitir conocimientos que adquirirlos, es decir el profesor considera que el ya lo sabe todo y no aprende de los alumnos, yo creo que es un error, todos aprendemos al mismo tiempo, todos somos agentes activos en la educación, hay que contar con los padres de los alumnos, consultarles, participar todos juntos, trabajar por mejorar la educación de nuestros hijos e hijas, los alumnos no pueden ocupar un lugar secundario en el proceso de aprendizaje. Todos somos importantes, no puede ser que únicamente se cuente con los alumnos para transmitir programas que vienen marcados del exterior, ahi que adaptar el currículum a los ritmos de aprendizaje de cada alumno o alumna, cada uno tiene un tiempo de aprendizaje, unos aprenden más rápido que otros, pero lo importante es respetar los tiempos y tratar de que todos los alumnos aprendan por igual y que ninguno de ellos se vea relegado a un segundo plano. Hay que buscar un entendimiento entre padres, alumnos y profesores y toda la comunidad educativa, incluído los vecinos de donde esté situado la escuela y toda la sociedad, porque una sociedad sin educación está condenada a extinguirse. Se debe acabar con el individualismo exacerbado que se da hoy en día en el mundo de la educación, hay que promover en nuestros alumnos a que participen, cooperen, escuchen las opiniones de los demás, eso es fundamental. El profesorado debe trabajar conjuntamente sin cortapisas, dejar a un lado el ego y ver que el mundo de la educación es muy importante para crear sociedades verdaderamente democráticas, educar en y para la democracia. Hay que reducir la competitividad extrema entre el alumnado, no es importante ser el mejor, sino mejorar como persona y adquirir cada día nuevos conocimientos que te ayuden en el futuro a ser mejor persona.
El alumno o alumna debe aprender a respetar a los demás, no hay que imponerle criterios, ni ideas impuestas, el alumno debe pensar por el mismo, ser crítico, tener un pensamiento autónomo y no ser un bienpensante, sino un libre pensador eso lo aprenden con el tiempo pero es fundamental para que se cuestione desde la intitución escolar los problemas que suceden en el mundo y se busquen soluciones para mejorarlos. La escuela debe convertirse en un agente transformador de la sociedad y no en reproductora de las desigualdades sociales, sino transformarlas y combatir esas desigualdades sociales y que todo el mundo pueda estudiar en igualdad de derechos y deberes. Los padres de los alumnos no deben ser agentes pasivos así como el profesorado y el alumnado, este tema de la educación es fundamental para crear personas democráticas y respetuosas con el medioambiente y todo tipo de culturas, educar empieza desde la base. El mal de hoy en día es que un sector del profesorado se han convertido en conformistas sociales, acuden a las aulas no ha formar personas democráticas sino instruir en conocimientos y sin comprometerse realmente con la educación, les importa únicamente las retribuciones económicas a fin de mes y no su papel de formadores de las futuras generaciones del país. Importa obtener títulos universitarios para acceder al mercado laboral en óptimas condiciones y ocupar un puesto de funcionario y tener asegurado tu futuro, nadie se implica realmente con la educación, hay que formarse diariamente para ser mejor profesional y dar lo mejor de ti a tus alumnos y alumnas, no extancarse y dar las lecciones por el libro y relizar las actividades que vienen en dicho libro, hay que emplear diversas metodologías para que el alumno aprenda por si mismo, esté motivado y se considere el agente principal en el proceso de enseñanza/aprendizaje. El profesor debe motivarse diariamente tanto a él como a sus compañeros, a sus alumnos y a los padres de los alumnos, a toda la comunidad educativa.

Es fundamental que la escuela aprenda revise lo que se da cada día y como se puede mejorar, analizar el proceso de aprendizaje, como aprenden los alumnos/as y trate de mejorarlo, transmitir valores democráticos, eso es muy importante, trabajar en equipo, padres, alumnos, profesorado. La escuela debe impulsar preguntas y no dar respuestas a los problemas que acontecen en la sociedad para ver como se pueden mejorar y solucionarlos. El alumno y el profesor deben ser iguales, aprender los unos de los otros y de toda la comunidad educativa, eso es fomentar un aprendizaje importante para el futuro, nadie tiene la verdad absoluta y como futuro maestro reconozco que se aprende más de los alumnos que lo que enseñamos, el alumnado es el que nos hace mejores profesores al tratar de buscar respuestas a sus preguntas y despertar nuestra curiosidad por el conocimiento en general. En fin la escuela y el profesorado debe adaptarse a los nuevos retos y exigencias de nuestra sociedad que es mejorar el sistema educativo y recuperar los valores humanísticos que están quedando en el olvido y defender la democracia, la ética y la moral para transformar la sociedad en un lugar habitable que defienda los derechos humanos y acabar con todo tipo de dogmatismos y absolutismos y actitudes injustas que a nada conducen.